lunes, 16 de enero de 2012

Estreno de "Eva" en Moscú


Peli: "Eva"
Puntuación: 5/10







De vuelta en Moscú veo con sorpresa que en el cine siguen poniendo cine español gracias a los denodados esfuerzos de distribudoras que desde luego tienen más moral que el alcoyano. Y se agradece, porque me quejaré de Moscú, pero de lo que no me puedo quejar es de la oferta en cine en versión original, una oferta rica, plural y hasta con maratones los fines de semana. Eso sí que no me lo esperaba hace un par de años, poder ver pelis en español como "Eva", "Carne de Neón", "Hierro" o "Chico & Rita"... ¡en Rusia!

































El estreno de "Eva" en Moscú coincide casi con el anuncio de las nominaciones para los Goya 2012. "Eva" sorprende con una ristra de nominaciones, la mayoría técnicas, pero entre las que encontramos también la de mejor actor para Daniel Brühl y la de mejor dirección novel para Kike Maíllo, este último con serias posibilidades. También están nominados el guión, la música, la foto, la dirección artísitica y de producción, el maquillaje, el montaje, el sonido y los efectos especiales. Ahí es nada. Ah, también está nominado Lluis Homar, por su interpretación de Max, el androide más gayer que he visto.

"Eva" es ciencia-ficción en un futuro no muy lejano, y estéticamente se podría encuadrar dentro de la tendencia de la ciencia-ficción "limpia" de "2001: Una odisea del espacio", "A.I. Inteligencia Artificial", o la más reciente "Moon". En realidad la ciencia-ficción es el marco y no el tema principal. Como el propio director comenta en su making of, "Eva" es una historia sobre personas. Los robots son más bien el contexto y la atracción de la película.

No nos engañemos, el principal McGuffin de "Eva" es saber si la niña protagonista es robot o no, a ver, que el público no es gilipollas. Una peli de robots llamada "Eva"... en fin. La peli mantiene cierto interés y se consigue que al final haya McGuffin con cierto tirabuzón, esto es, que no quede todo en saber quién mató al mayordomo. En el lado positivo, algunos elementos apabullantes. Primero, la estética, los efectos y el acabado en post-producción. Realmente excelente, uno se cree los robots, más aún, se los ve como una extensión del medio orgánico en el que se mueven, una deliciosa ciudad de montaña sumida en una suerte de años setenta futuristas. Los actores, bueno. No acaban de petarlo. Pero Brühl y la niña Claudia Vega tienen cierta química y un talento indudable que les permite flotar en el interés del espectador hasta el final. El resto, los pobres Amman y Etura, poco pueden hacer con lo mísero de sus papeles, personajes planos y con menos vida que un mondadientes, ambos un manojo de clichés.

El gran problema de "Eva" es que si le quitáramos a la historia la pátina embellecedora de ciencia-ficción, que al fin y al cabo no es la historia principal, el cuento no tiene mucho interés. El meollo de la cuestión es un supuesto triángulo amoroso-relación tormentosa entre dos hermanos y la chica, Marta Etura. Todo ocurrió en el pasado, del cual no sabemos nada, pero lo suponemos. A partir del reencuentro entre el prota y su hermano se sigue una senda pavimentada de clichés y en la que llama la atención la poca química entre los personajes, que parecen los verdaderos robots de la obra. El guión no es que sea malo, es... triste, soso, acartonado, sin aliento. Lamento decirlo, pero como de telefilme. Los actores recitan sus parlamentos y uno ve trozos de guión saliendo de sus bocas. Poca verdad, poco interés, poca creación de personajes. Me aburro.

Mi caaasaaa...














Es una pena, porque realmente "Eva" es una película que quiere ser querida, tiene todos lo ingredientes. Yo lo deseaba. Ciencia-ficción bien hecha, y en España. Guau. Durante la primera media hora, pensé: "Coño, qué buena factura tiene la peli. Aunque quisiera quemarla, es ingnífuga". Pero llegados al final, casi pidiendo la hora, me encuentro preparando la hoguera. Una pena, pero "Eva" es tan olvidable...

Y volviendo a los Goya, a ver, no puedo morderme la lengua. Doce me parecen demasiadas nominaciones. A nivel técnico pase, pero el guión, el montaje y Lluis Homar... brrr. ¿De verdad,  para tan poco ha dado nuestro cine este año? Y encima llego a casa, y para sacarme la espina, veo la primera entrega de la serie "Sherlock", de la BBC. Ay, mi madre. ¡Esto sí que es brillante! Sé que no tiene nada que ver una cosa con otra, pero... ¡vaya nivelón! De lo mejor que he visto últimamente (pequeño premio hasta el lector que haya llegado a este párrafo final, no te pierdas la serie "Sherlock", 2010, BBC).

Poseso. A la hoguerísima.
Flushg!

martes, 3 de enero de 2012

Nada es imposible


Peli: "MI4: Ghost Protocol"
Puntuación: 6/10






 
Nada es imposible, incluso que Tom Cruise vuelva a relanzar su carrera. Y parece que lo está consiguiendo. La cuarta entrega de "Misión Imposible" lleva liderando la taquilla desde su estreno y parece imparable. Quién lo iba a decir, una de las máximas de Hollywood se vuelve a cumplir. Las viejas fórmulas funcionan y lo que vendió antes vuelve a vender, aunque se trate prácticamente del mismo producto con otro nombre. Ariel ultra, nueva fórmula, margarina Tulipán, nueva receta más sabrosa y con menos calorías, Misión Imposible 4, Protocolo Fantasma.

Se impone el estilo capuchón inquisitorial

































La peli trata de... em... da lo mismo. La dirección corre a cargo de Brad Bird, el director de "Ratatouille", otro que se lanza a la dirección de actores después de la animación. Si algo sabe hacer Cruise últimamente es acompañarse de buenos directores que no le jodan la marrana, después de truños como "MI2", bien recordada sobre todo en España por el reflejo tan marrullero que se daba de nuestro bienamado patrimonio cultural (¿cómo era? ¿falleras en la semana santa andaluza? No tuve la gracia de verla, perdonadme). La tercera entrega sí que estuvo mejor, con la acertada dirección de J.J. Abrams y la aportación siempre interesante de Philip Seymour Hoffman como villano carismático. Hablando de villanos, el que le da la réplica a Tom en esta entrega es el que hace de Mikael Blomqvist en las pelis suecas de "Millenium", el tal Michael Nykvist (tirabuzón intertextual si recordamos que Daniel Craig hace el papel del mismo en la nueva versión de "Millenium" y a su vez es Bond, la saga clónica de "Misión Imposible" y... rayos, me da vueltas la cabeza). Soso como él solo pero vamos, es que su papel no da para mucho. Los demás elegidos para el equipo imposible son Simon Pegg, la buenorra de Jane Carter y el prota de "The Hurt Locker", Jeremy Renner.

La gran baza de la peli es el segundo acto, rodado en el edificio más alto del mundo, el Burj Khalifa de Dubai, donde Ethan Hunt la lía parda y hace de hombre araña en un par de escenas curradas, seguidas de una interesante y muy bien llevada persecución dentro de una tormenta de arena. Eso sí que no lo había visto nunca, gran idea. Lo malo quizá sean los malos, que no dan mucho juego, con lo chachi que era el malo de la tercera entrega. El primer acto en Rusia está bien, pero el tercero tampoco acaba de petarlo.
En fin, más de lo mismo, juego de clichés, malo poco interesante y tercer acto flojete.

¿Y después de rajar tanto de la peli y de la saga por qué no la mandas a la hoguera, inquisidor? Buena pregunta, queridos niños. Respuesta: es que el cóctel funciona. Aunque no da para mucho más, la peli da lo que promete, pese a las objeciones. Lo demás está muy bien y las dos horas que dura se te pasan rapidito y con la sensación de haber invertido bien los euros.

Lo que no hará uno para llamar la atención...










He de admitir que Tom Cruise me cae bien. Antes era una especie de Raúl González versión Hollywood, el chico de oro, la gran esperanza blanca. Bleagh. Luego se hizo más ecléctico, movió bien sus hilos e hizo cositas arriesgadas y guapas, como "Entrevista con el vampiro" o "Magnolia". Demostró que sabía actuar y que efectivamente es un monstruo del cine comercial. Me da penica que con lo que curra este hombre no acabe de petarlo y se lleve poca recompensa con productos de calidad parecida a otros que sí que triunfan, vayan vuesas mercedes a saber por qué. Menos más que siempre le quedan las secuelas imposibles para recuperarse y probar de nuevo.

Valga la absolutio, pero recíclese, señor Cruise, que el grano del abuelo no da para más.

¿O sí?

(Entra tema de Misión Imposible: ¡PAM PAM PAM PAM PAM!)