miércoles, 13 de junio de 2012

Lo mejor del 2011


Pelis: "Nader y Simin, una separación" y "Le Havre"
Puntuación: 10/10







No está solo la Inquisición para quemar herejes. A veces, la mayoría, llega uno tarde a ver lo mejor. Las razones son muchas, pero lo principal es que al final las mejores películas no llegan a estrenarse, o se estrenan solo en festivales o en salas gafapasteras. Como todos sabemos, la calidad y el megaplex no están bien avenidas.

Y os habla uno que también disfruta del blockbuster, que quede claro. De hecho me salen ronchas porque han estrenado "Prometheus" en Moscú y no puedo verla, ya que solo está en versión doblada. No creo que sea necesario ahondar en la frustración de mi corazón friki. Por no hablar de "The Avengers", que estoy deseando ver en pantalla grande. Cruzo los dedos porque aguante en cartel hasta mi regreso a España este verano. Precisamente por esta limitación que tengo para disfrutar de los estrenos tengo que buscarme la vida por internet. Pero el esfuerzo también tiene su recompensa.

Me gustaría presentaros dos de las mejores películas del año pasado, al menos para un servidor. Una de las dos, "Le Havre", se estrenó recientemente en Moscú y por eso me animé a verla*. La otra, "Nader y Simin, una separación", sí que es más conocida, ya que se llevó este año el óscar de la academia a la mejor peli en habla no inglesa. No me extenderé en las valoraciones, ya que las pelis tienen cierto tiempo y tampoco es momento de inventar la pólvora.

De cine iraní tengo menos idea que de sismología, no lo negaré. No recuerdo haber visto otra peli iraní en mi vida. Sí que había oído que este país tiene cierta tradición cinematográfica de calidad. De otro modo y por otra parte no se explicaría la maravilla que es "Nader y Simin". Poco puedo hablar pues del director y guionista, Asghar Farhadi, excepto para decir que es el puto amo.

La peli, en una frase, describe la crisis matrimonial de una pareja de clase media-alta que además tiene el problema de tener que cuidar a un padre con Alzheimer. Mejor verla sin saber mucho más. "Nader y Simin" supone un alarde de sinceridad narrativa, un ejemplo de buen hacer en el cine que se basa en buenas historias, vívidas, basadas en la experiencia. Un retrato fiel de la realidad, en la definición más ancestral de lo que supone el arte, narrando además un hecho y una problemática tan antigua como actual.

Barreras de comunicación














Personalmente a la Inquisición le llamó la atención la fidelidad del retrato de la lucha cotidiana de una familia normal. Además la peli consigue de forma sutil y no tan sutil lanzar pullas contra el fundamentalismo en todas sus formas. Tampoco soy un experto en el Islam y la situación religiosa en el Irán actual, pero se percibe en el film una actitud que no me atrevería a llamar crítica pero sí al menos reflexiva sobre este y otros asuntos que afectan a la gente común y corriente.  

"Le Havre" es de otro palo totalmente, está a un palmo del suelo. No conocía el cine de Kaurismäki (con diéresis, el tío), pero ahora soy acérrimo. Aunque suena a griego, el tipo es finlandés. Su estilo, sencillo. Su personalidad, comprometida. En esta última peli nos da su visión del problema de la inmigración a través de una sencilla historia que transcurre en la ciudad portuaria de Le Havre. El protagonista, un carismático limpiabotas que apenas tiene para vivir con su pareja, una mujer de salud frágil, encuentra a un niño inmigrante y decide ayudarle, como no puede ser de otra manera, ¿verdad?

"Le Havre" llama la atención principalmente por la preciosidad de la imagen. Casi cada fotograma es un delicioso cuadro, una foto angulada con cariño. Pero sin efectismo, al contrario. Parece la mirada angélica de un niño que descubre la belleza exquisita en una pared, una ventana o el perfil de un hombre de ojos profundos acodado en la barra de un bar.

A nivel narrativo también prima la sencillez. En realidad la pelicula es un cuento con héroes, princesas y villanos, simplemente ambientado en el día de hoy. El príncipe es un negrito perdido, y su héroe es un jubilado de noble corazón que va superando los obstáculos con picardía y recursos insospechados. Lo que me maravilla de esta película es, simplemente, la belleza que alcanza. Visual y narrativamente. Si fuera un libro, sería una novelita escrita en letra grande y prosa ligera en la que nos sorprenderíamos al descubrir retazos de poesía. Vamos, una genialidad difícilmente repetible.  

Príncipes y princesas de hoy en día















Cuando hablo de lo mejor del 2011 me refiero a cine que conmueve, que resuena por dentro. Tan difícil de encontrar. Por eso valga esta reseña, que aunque para muchos llegue tarde, era para mí muy necesaria. Escribo con el calentón y como es natural no he visto todo el cine del año pasado, pero si esto no está entre lo mejor del 2011, me rapo la cabeza. Probadme!

Saludos churruscados.

*Bueno, no solo por eso. También vi hace poco una presentación del film en el programa de rtve "Días de cine", al cual me siento cada vez más agradecido por haberme acercado a más de un título indispensable. Gracias, muchachos.

2 comentarios:

Verónica Proskurnina dijo...

¡LAS TRATARÉ DE VER!

Questions?? dijo...

Me la voy a bajar. Has despertado mi interés por la peli